Der Wilhelmshof Hotel Viena

Mi estancia en Der Wilhelmshof fue excelente. Estuve alojado por una semana y fue perfecto para mi viaje de negocios. El hotel se encuentra en una buena ubicación, cerca del Prater y con fácil acceso al metro. El personal fue extremadamente amable y servicial en todo momento. Las habitaciones eran modernas, cómodas y estaban bien reformadas. Tuve la ventaja de contar con parking en el mismo edificio, lo cual fue muy práctico. El desayuno era abundante y de buena calidad, y me gustó especialmente el encanto del patio-jardín interior del hotel.

Os recomiendo este fantástico lugar.

Este hotel superó nuestras expectativas en términos de lujo y comodidad. Las instalaciones eran impresionantes, con una terraza al sol y un área ajardinada que nos brindó un ambiente exclusivo y relajante. Nuestra habitación fue una experiencia de lujo en sí misma, con comodidades exclusivas que realmente nos hicieron sentir mimados. El desayuno servido en la habitación fue delicioso y nos proporcionó un buen comienzo para el día. Además, disfrutamos de una tarde agradable en el bar y salón del hotel, con una gran variedad de bebidas y aperitivos disponibles. La ubicación también fue conveniente, con fácil acceso al transporte público y a poca distancia de las principales atracciones turísticas de la ciudad.

Aunque nuestra experiencia fue en su mayoría excelente, tuvimos un pequeño problema con el servicio de habitaciones. Pedimos el servicio de habitaciones y, aunque la comida era deliciosa, hubo un ligero retraso en la entrega.

Habitación espaciosa, cama cómoda. Desayuno excelente y horario amplio. Cerca de la Ópera y parque de atracciones. Personal amable y servicial. Muy limpio y con apartamento para tres personas. La ubicación es buena, cerca del metro y de la Catedral de San Esteban.

Personal amable y disponible. Ubicación conveniente cerca del centro. Desayuno buffet con opciones veganas. Habitaciones tranquilas y amplias. Hermoso patio-jardín interior.

No hay nada que no me gusta.

Mi estancia en este hotel fue increíble. Las instalaciones del hotel son fantásticas y su ubicación es excelente. Está muy cerca de una estación de metro, lo cual facilita mucho desplazarse por la ciudad. Además, el hotel está cerca del centro, lo que hace que sea muy conveniente para conocer la ciudad rápidamente. También está cerca de la estación de tren, lo que es muy práctico si planeas ir al aeropuerto. El desayuno fue fantástico, con muchas opciones y un servicio genial. Quiero destacar especialmente la atención de una camarera llamada Ana, que fue muy amable y nos ayudó mucho con recomendaciones para nuestra visita a la ciudad. La habitación era amplia y cómoda, perfecta para una pareja y un niño. También me gustó mucho contar con una pequeña nevera y un termo para hacer té o café soluble. Otro aspecto que me pareció muy conveniente fue la opción de guardar el equipaje en el garaje hasta que nos fuimos al aeropuerto. Sin duda recomendaría este hotel y volvería a hospedarme aquí.

Me gustó todo.

Increíble calidad-precio y excelente ubicación. El hotel está situado cerca de la estación de tren Praterstern y a pocos minutos en metro del centro de la ciudad. El personal de recepción es extremadamente amable y siempre dispuesto a ayudar. El hotel está muy bien decorado y las habitaciones son espaciosas, cómodas y muy limpias. El baño es amplio y cuenta con una ducha de alta presión. Además, el desayuno es muy completo y variado. En general, recomendaría este hotel sin dudarlo.

El hotel está ubicado en una zona muy conveniente, cerca de la estación de tren y de los medios de transporte público. Además, se encuentra a poca distancia de los principales lugares de interés y del parque de diversiones. Las habitaciones son amplias y cómodas, con baños bien equipados. El personal es amable y servicial, y el desayuno ofrece una buena variedad de opciones.

El único aspecto negativo es que el barrio donde se encuentra el hotel puede parecer algo conflictivo en términos de estética.

Mi estancia en este hotel ha sido excelente. Me encantó la ubicación tranquila del lugar, ya que estaba alejado del bullicio del centro pero aún así cerca de la estación de metro. El servicio de habitaciones fue impecable, con una limpieza y atención excepcionales. Además, disfruté mucho de las comodidades de la habitación, como el minibar, el sofá cama y el wifi gratuito. También quiero destacar el desayuno, que era variado y delicioso. Sin duda, este hotel ofrece una gran experiencia de comodidad y calidad.

Recomiendo este hotel a cualquier persona que busque una estancia de lujo y comodidad. ¡No te arrepentirás!